Como nuevo
Director de Recursos Humanos (CHRO) en Winpak, mi trayectoria profesional ha
estado entrelazada con mi profundo compromiso personal de defender la
diversidad, la inclusión y el respeto. Como aliado masculino en el camino hacia
la igualdad de género en el lugar de trabajo, tengo la responsabilidad de
utilizar mi actual posición para garantizar un cambio sistémico que permita a
las mujeres prosperar. Sin embargo, no es sólo mi profesión la que da forma a
mi perspectiva sobre estos importantes temas. Como padre de tres mujeres
jóvenes, de 25 y 23 años (gemelas), mi comprensión de la importancia del Día
Internacional de la Mujer va más allá de los debates en el lugar de trabajo y
las iniciativas de recursos humanos. Resuena profundamente en mi hogar, donde
el empoderamiento, el avance de las mujeres y los desafíos que enfrentan no son
sólo conceptos abstractos, sino que forman parte de nuestra experiencia.
El Día
Internacional de la Mujer (DIM), se celebra cada año el día 8 de marzo y sirve
como recordatorio de los avances logrados en los derechos de las mujeres y el
camino en curso hacia la igualdad e inclusión de género. Este es un día para honrar los
logros de las mujeres que influyen en nuestras vidas, reconocer los desafíos
que continúan enfrentando y renovar el compromiso de fomentar un mundo en el
que cada mujer tenga la oportunidad de participar plenamente y tener éxito. Esto
me resulta muy familiar, ya que puedo usar mis funciones tanto personales como
profesionales.
En mi
calidad de líder de Recursos Humanos, he tenido el privilegio de encabezar
iniciativas destinadas a promover la diversidad y la inclusión de género desde
que lancé el primer consejo de diversidad en el año 2002 en una de las cuatro
grandes firmas de servicios profesionales. A partir de ahí, mi misión
profesional es incorporar la diversidad y la inclusión en todas las prácticas
relacionadas con el talento que dirijo, incluido el desarrollo de liderazgo
adaptado para abordar los desafíos con sesgo de género y prácticas accesibles
de reclutamiento, remuneración y promoción neutrales en cuanto al género. Mi
objetivo en Winpak es implementar una diversidad en todas nuestras prácticas
relacionadas con el talento a través de la comunicación, la retroalimentación, la
responsabilidad, involucrado a todos los empleados en nuestro progreso. La
diversidad y la inclusión no son sólo iniciativas y políticas, son principios
fundamentales que deben impregnar en nuestro pensamiento y en nuestras
decisiones cotidianas para tener un impacto real.
Mi
compromiso con la igualdad de género se extiende más allá de los límites del
trabajo. Tiene sus raíces en mi papel como padre, donde he participado de
primera mano en los desafíos y victorias únicos asociados con la crianza de mis
tres hijas en una sociedad que aún lucha contra los prejuicios de género. Cada
una de mis hijas ha trazado su camino, navegando por las complejidades de la
educación, ingresando a la fuerza laboral y las relaciones. Desde sus primeros
años, he tratado de inculcarles la creencia de que su género nunca debe
representar una barrera para lograr sus objetivos. Las animé a perseguir sus
intereses y desafiar las normas sociales que pueden limitar su crecimiento
personal y profesional. Al mismo tiempo, éramos conscientes de las realidades
que inevitablemente encontrarían: como techos de cristal, prejuicios
inconscientes (y muchas veces conscientes) y expectativas sociales que podrían
bloquear su progreso y erosionar su confianza. Mi papel como padre es, más
ahora que nunca, reforzar su determinación y ayudarlas a desarrollar las
estrategias y habilidades que necesitan para alcanzar sus objetivos. Uno de los
aspectos de ser su padre que me toma más en serio, es seguir recibiendo
llamadas de ellas pidiéndome opiniones y consejos sobre los problemas que
enfrentan. Si bien no vivo su experiencia, mis hijas mejoran mi empatía y
comprensión de los desafíos que enfrentan las mujeres y fortalecen mi
determinación de desempeñar un papel positivo en la eliminación de prejuicios y
barreras.
Para mí, el
poder de la diversidad es un hecho. Diferentes perspectivas y orígenes nos
presentan la oportunidad de potenciar la innovación, el servicio, la
penetración en el mercado y ayudarnos a tener éxito personal y empresarial. El
catalizador que nos permite aprovechar las diferencias que todos ponemos sobre
la mesa es la inclusión. Es la forma como cada uno de nosotros trata
activamente, todos los días, de ayudar a otros a sentirse bienvenidos,
respetados e involucrados. Esto genera la confianza que necesitamos para
permitir que nuestra gente desarrolle todo su potencial.
En este Día
Internacional de la Mujer, estoy reflexionando sobre el progreso que hemos
logrado, pero también sobre el trabajo que nos espera a todos en Winpak. Como
CHRO, me comprometo a aprovechar mi experiencia e influencia para inspirar la
inclusión en todas nuestras interacciones y prácticas laborales. Como padre, mi
compromiso va más allá de los cambios de políticas y las iniciativas
corporativas. Se trata de fomentar una mentalidad de igualdad y respeto que
trascienda nuestra generación y garantice que mis hijas y las futuras
generaciones de mujeres puedan participar plenamente y tener éxito en un mundo
que considera el género y otras diferencias como fortalezas.
Autor
Sean McConkey
Chief Human Resources Officer
Winnipeg, MB Canada
sean.mcconkey@winpak.com
Enviar comentario